03 mayo 2010

INVITADO DEL MES: ANTONIO GARCÍA HERNANDEZ

EDUCAR EN PARTICIPACIÓN



Antonio García Hernandez

Técnico de Juventud del Ayuntamiento de Molina de Segura






Quiero en primer lugar, agradecer al equipo de este blog su invitación y animarles en el trabajo que están realizando desde la oficina de participación juvenil.

 Dos aspectos sobre los que me gustaría reflexionar y aportar al debate de la participación juvenil son educar en la participación y los espacios jovenes como motores de participación. Y me gustaría hacerlo desde la experiencia de puesta en marcha de un programa de participación.

Estoy convencido de que se puede, y se debe, aprender a participar, entendiendo que hay muchas formas de desarrollar ese proceso. Convencidos de esta necesitad hace ya tres años que a través del programa de intervención que realizamos en los Centros de Secundaria de Molina de Segura, implantamos un proyecto de participación por el que se realizan 2 sesiones de trabajo con alumnos de 3º de ESO sobre participación y 1 sesión sobre recursos juveniles en 1º de ESO. En estas actividades nos planteamos la formación de los jovenes para que conozcan la participación como un instrumento a utilizar si lo desean, que les puede ayudar en sus iniciativas, intentando que tengan como referencia a jóvenes que ya están involucrados en asociaciones o actividades. Paralelamente en los 4 IES de Molina de Segura estamos trabajando la formación y dinamización de grupos de trabajo con la interculturalidad como elemento de fondo. Estamos en una etapa aun inicial por la poca andadura de esta parte del programa, pero lo realizado hasta ahora nos indica que estamos en el buen camino. Y el reto es seguir acompañando a los grupos que se formen en los IES, y seguir apoyando a esos alumnos cuando ya no estén en su centro educativo.

En el planteamiento de esta intervención esta la participación entendiendo que es muy importante el saber, además de querer y poder. Creemos que hay que educar en la participación y apostamos por abordarla y fomentarla también desde la enseñanza formal. Y los centros, en nuestra experiencia, han sido bastante facilitadores a la hora de dejarnos realizar en horario lectivo estas sesiones formativas y su colaboración indispensable en el desarrollo de todo el programa.

Otro elemento que ha nos ha ayudado en la implantación y continuidad del programa es la importancia y prioridad de esta actuación a nivel Municipal. Dentro de las limitaciones que todos tenemos en estas áreas de trabajo, hemos podido conseguir garantizar esta continuidad, aunque nuestros medios estén ajustados. Las dificultades en su desarrollo vienen dadas por ser un elemento externo al centro y al sistema educativo, así como la aplicación de estrategias adecuadas para llegar al alumnado.

Otro elemento que me gustaría introducir dentro de las conclusiones obtenidas de la implatanción de un programa de participación en la educación formal es la permeabilidad de nuestros servicios a las propuestas y demandas de los jovenes. Y es que, tras poner en marcha estos procesos que implican abrirnos a la participación, nos dimos cuenta que teníamos que adaptar las estructuras de nuestra Concejalía y ponerlas al servicio de la participación, atendiendo la propuesta de cualquier joven o grupo que quiera llevar a cabo alguna actividad o iniciativa, y más cuando esa iniciativa pueda ser consecuencia de nuestro trabajo previo de formación, fomento e impulso de la participación. Tenemos que disponer de los medios y ponerlos a su disposición para que lleven a cabo su propuesta, hacer de facilitadotes de su iniciativa, pero ellos son los protagonistas y son los que marcan el camino. Posiblemente una de las mejores cosas que como técnico de juventud he tenido todos estos años es poder ser participe de las iniciativas e ilusiones de muchos jovenes que han terminando marcándonos el camino por donde debíamos seguir trabajando.

Actualmente Molina de Segura esta viviendo uno de sus mejores momentos en el asociacionismo formal, con la irrupción de una generación de jovenes que mantienen no solo sus asociaciones en un constante movimiento, sino que han sido capaces de trasladarlo a su federación, viviendo y transmitiendo lo que realmente es la participación. También quiero dentro de la brevedad hablar de los espacios jovenes como motores de participación. Porque, al igual que se ha creado una muy buena red de Informajovenes, con presencia en casi todos los municipios, no ocurre lo mismo con los espacios jóvenes. Espacios donde las asociaciones y grupos tengan un apoyo logístico, puedan trabajar por su finalidad, sea un lugar de experimentación de la participación, de compartir recursos, y punto referencial para asesorar, formar y ayudar sobre todo lo que tiene que ver con la participación. Un desarrollo de infraestructuras juveniles que se hace cada vez más necesario para seguir trabajando con jovenes. En ningún caso hablo del lugar donde se ubica la Concejalía de Juventud, si no de esas salas y espacios puestas a disposición de los grupos de jovenes que pueden generar en ellas actividades. Y quede desde aquí un elemento reivindicativo también en este apartado de la necesidad de establecer un plan de estas infraestructuras juveniles a nivel regional.

Hay muchas experiencias muy buenas conocidas en este apartado del fomento de la participación en el medio escolar como el 9.e, pero me gustaría resaltar una iniciativa local como es la puesta en marcha, desde el movimiento vecinal, de la Escuela de participación ciudadana de Molina de Segura (http://www.participamolina.org//), que también incluye la formación a jovenes y que os invito a conocer. Si queréis conocer un poco mas nuestro trabajo, nuestros programas podéis consultar nuestra web http://www.molinadesegura.es/  y  http://www.enganchate.org/ y para conocer el movimiento asociativo de Molina de Segura http://www.fajum.com/.


Antonio García Hernandez.

Técnico de Juventud del Ayuntamiento de Molina de Segura

5 comentarios:

Equipo de profesionales en materia de participación juvenil de Nivel 3 Gestión Sociocultural dijo...

Poco a poco los Ayuntamientos se están dando cuenta que la participación no es una témática más sino una modelo de intervención general con jóvenes. Ya no sólo es bueno que se realicen programas de participación juvenil como los que lleváis a cabo desde Molina sino la estrategia de recoger la opinión de los jóvenes, sus planteamientos y propuestas e intentar que las lleven a cabo. ¿Hay algo mejor que eso para hacernos creibles? Creo que no.

Estamos en muy buen momento para trabajar la participación juvenil en los Ayuntamientos y ha llegado el momento de poder trabajar en grupo y en función de aspectos concretos que interesen a Ayuntamientos y propicien un trabajo en común.

Desde la OPJ estamos para propiciar esos espacios y para ayudar en todo lo posible.

Un abrazo Antonio y ya sabes donde estamos.

Juan

Equipo de profesionales en materia de participación juvenil de Nivel 3 Gestión Sociocultural dijo...

Enhorabuena por vuestra iniciativa y por llevar a cabo una forma de trabajar digna de seguir.

Creo que vamos en la misma línea y que gracias a nuestras experiencias y estilos de trabajo podemos nutrir y fomentar la buena práctica de “Educación para la participación”.

Cómo bien dices Antonio, tenemos que “hacer de facilitadores”, servir de guía y no olvidar que quien marca el camino son los propios jóvenes, que nosotros somos los que tenemos que poner nuestros medios y recursos a su disposición y no al revés.

Mis más humildes y sinceras felicitaciones y no está de más recordaros que podéis contar con todo el personal de la OPJ para cualquier duda, apoyo o puesta en común que necesitéis.

Un fuerte abrazo!

Isabel Guerrero

Mayte dijo...

Primero de todo, darte la enhorabuena por el importante trabajo que estáis haciendo en el ámbito de la participación juvenil en Molina.
Creo que la educación para la participación todavía es una asignatura pendiente para muchos, y sin ella, lo cierto es que es imposible que los jóvenes tomen las riendas.
La afirmación: “los jóvenes no participan en nada”, bueno, primero tienen que aprender a como hacerlo ¿no?.
Desde la Oficina, los programas de educación para la participación que se están llevando a cabo nos han demostrado que cuando los jóvenes aprenden a utilizar la herramientas que tienen a su alrededor le cuesta mucho menos embarcarse un proyecto propio. Es muy gratificante comprobar casos de jóvenes que no estaban acostumbrados ni siquiera a plantearse qué problemas pueden encontrar en su comunidad y, tras un par de años de trabajo con ellos, toman las riendas en proyectos de cuidado del medio, prevención de drogodependencias, apoyo a colectivos necesitados, dinamización de las fiestas patronales…etc. Es entonces cuando después del esfuerzo se empiezan a ver los frutos, que aunque han costado…son muy, muy reconfortantes.
Un saludo.
Mayte.

Equipo de profesionales en materia de participación juvenil de Nivel 3 Gestión Sociocultural dijo...

En primer lugar Antonio, me uno a la dinámica de expresarte nuestras felicitaciones junto al resto de mis compañeras/os.

Es de felicitar que técnicos de juventud apuesten por la participación de los jóvenes de su entorno y que además arriesguen implementando nuevos programas que inciden en que desde edades tempranas y a través de los canales formales se conozca la posibilidad "si se quiere", en palabras del propio Antonio, de ejercer nuestro derecho a participar de la vida social de nuestra comunidad.

A esto unimos el extraordinario movimiento asociativo juvenil de Molina, que se articula a través de FAJUM y que tan enérgicos y entusiastas se muestran habitualmente en Zona Joven, hace pensar que tienen un importante apoyo por parte de los técnicos municipales.

Pero además de felicitarte, me gustaría sumarme a tu reivindicación de la importancia de los espacios como herramienta para la participación.

Si además de trabajar en el ámbito metodológico, propiciamos esos espacios, creo que será mas fácil implicar a los jóvenes en la participación y en la gestión de los mismos, huyendo de asociar este término al "consumo de actividades" únicamente.

Gracias por tu reflexión Antonio.

Un saludo.

José Angel

Anónimo dijo...

Aprendi mucho